Andre in the club with iPod

Nuestros amigos atrapados en los años cincuenta nos invitaron a salir un sábado. Siempre he querido vestirme como Carlos: guayabera-kakis y un Dodge con aletas. El club-hacienda-cafetalera-de-mil-setecientos era extrañamente plano para su ubicación en Lomas de La Lagunita (Ovidio dice que eso se conecta por detrás con Macaracuay, yo lo he visto en Google Earth). […]

panfletonegro, séptimo grado

Una vez quise hacer una página en la que pudiese publicar algunos poemas, algunos comentarios que no había dejado morir, un pataleo ocasional. Mi único compromiso estético era que no debía caer en el patetismo de las páginas personales de Geocities que para la época dominaban el contenido no-oficial de la red. Un giro interesante […]

Sacagrapas

Hasta ese momento no me había dado cuenta de que siempre he estado fascinado por los sacagrapas, esos correctores del orden, mandíbulas filosas tan fuera de lugar en la oficina por la obviedad de su significado. Siempre los había preferido como instrumento de batalla y ocio. Pensaba, inocentemente, que ese gusto era normal, que no […]