Resistencia intelectual

Si eres un «intelectual» (alguien que vive gracias al uso que le da a su cerebro), es realmente estúpido ofrecer resistencia física a la gente que te echa la policía encima. Es una pelea desigual. El equivalente a que los retes a ellos a una partida de ajedrez o a escribir un artículo informado y coherente en menos de 2 horas.

Cada vez que hablo de esto, vuelvo al Apesar de você. Por eso, cuando vivía en Venezuela insistía en decir «Congreso» y «Caracas Hilton» y «Ávila Mágica». Los antiguos nombres, esas eran mis granadas. Era mi forma de decir «nada de lo que haces es lo suficientemente relevante en mi vida como para que yo invierta tiempo en reprogramarme».

Debo acotar que esta idea no la aprendí durante el chavismo. La aprendí gracias al régimen anterior, que era ya bastante proclive a anularte si no pensabas como ellos querían.

Así mismo, en España no pierdo la oportunidad de persuadir a quien me oiga de que el régimen está divorciado de los electores y el primer paso para la reconciliación es la cárcel para todos los banqueros. Eso nunca pasará y España se irá a pique y quizás, con un poco de suerte, asumirá la realidad de que no es distinta a sus colonias. Hago y digo esto porque usar las armas que mejor manejo es muchísimo mejor que salir a quemar contenedores de basura.

Diseñando el libro del futuro

Si trabajas con libros y entiendes inglés, esta es una presentación que debes ver.

 

 

Craig Mod hablando sobre la migración de físico a digital, la definición de márgenes entre lo físico y virtual, Borges, nuevos retos para las portadas de los libros, el kindle como un producto que evoca a 1972 para mejorar sus ventas entre los escépticos y cómo debemos diseñar los libros del futuro (¿o presente?) para reproducir lo que verdaderamente importa.

Sin exageraciones, 40 minutos que cambiarán la forma como ves a los libros digitales.

 

Superwoman

Esta semana he estado pensando que Djavan es el Stevie Wonder de Brasil. Que Luz y Lilás capturan el sonido de los 80s como pocos discos de la Música Popular Brasilera.

Esta idea tiene una trampa, porque Stevie Wonder participa en la grabación original de Samurai. Así que no es raro que piense eso. Excepto que cuando lo pensé no sabía que era Stevie Wonder tocando la harmónica en ese tema. En fin, lo importante no es Luz, ni Lilás, ni Samurai, ni Djavan, ni la harmónica. Lo importante es Stevie Wonder y que en el tren, un lunes en la tarde, pensé «Djavan es el Stevie Wonder de Brasil» y caí de nuevo en Superwoman.

Superwoman es un hito en el Mowtown. Es el primer soundscape del R&B (y quizás el primero en la música popular. O al menos el primero que sigue la definición actual del término), un viaje sonoro en forma de díptico que propone el sonido predominante de diez años en el futuro –piensa en eso por un momento, deja que caiga. El tema asoma algunas impresiones generales de ese infierno aterciopelado que es vivir con una mujer que constantemente cambia de opinión, se va de tu vida y vuelve. Retrato del artista joven víctima de la histeria.

Hoy es la fête y por eso este post se publica hoy. Si me ven por ahí, seguro estaré con los ojos cerrados, cabeceando y cantando en falsetto Where were you when I need you, like, right now?

 

El disco puedes comprarlo aquí